sábado, maio 12, 2012

Defendiendo a Monseñor Williamson



En muchísimos sitios, serios por lo demás muchos de ellos, se culpa a Monseñor Williamson de haber filtrado esa carta. La cigüeña de la torre, uno de las bitácoras más leídas sobre temas eclesiásticas en lengua española, rápidamente se hizo eco y Pacopepe, con su visceralismo a veces un tanto superficial, le echa la culpa a Monseñor Williamson. Digo esto con todo el cariño, porque Pacopepe, con quien me he encontrado en varias comidas y acontecimientos, es una persona deliciosa de trato y amable a más no poder, aunque a veces tenga los fusibles cortos. Otro tanto se puede leer en Le Figaro, donde Jean-Marie Guénois es de la misma opinión. Espero que Pacopepe no se haya dejado llevar de cierto seguidismo porque suele manejar información de primera.
Pues discrepo de la mayor. No creo que haya sido Monseñor Williamson. A Casa de Sarto tenía estas cartas más de 48 antes de que fueran publicadas en el internet. Por supuesto que de nosotros no saldría nada referente a todo esto. Pero déjenme hacer una pequeña pesquisa “policial” con Vds que verán que, razonablemente, pone muchos peros a esa autoría que Guénois o Pacopepe Fernández de la Cigoña atribuyen a Williamson.
Resulta que, como dije, las cartas originales fueron filtradas a cathinfo, pero lo que allí pueden ver Vds ahora no es lo que sacaron en primer lugar. El pdf de la carta de los tres Obispos era un pdf que era generado de un documento, pero no del documento final, sino de un borrador previo (algo muy relevante, ¿quién tiene los borradores?). De ahí que algunas de las mejores y más serias bitácoras tradicionalistas, como Rorate Coeli, no hayan querido publicarlo para evitar entrizarse los dedos. El pdf de Monseñor Fellay, el P Pfluger y el P Nély, sin embargo, es claramente un documento escaneado (se ven hasta los pliegues de cómo ha sido doblado y el tamaño en pdf es mucho mayor, por ser escaneado, y no obtenido de un documento en MS Word o algún otro procesador de textos). 
Más aún, en los comentarios muy iniciales a cathinfo se puso uno, retirado, que decía: “Father, you have left traces …”. Efectivamente, se veía que los pdfs inicialmente filtrados eran personalizados. Y había detalles en la personalización de estos pdfs que eran comprometedores y apuntaban la autoría del mismo.

Más aún, había un error gramatical de concordancia en el francés impropio de quien habla el francés como 1ª lengua (caso de Monseñor Tissier de Mallerais) o prácticamente perfecto, como es el caso de Monseñor Williamson.

Más aún, la fecha estaba indicada con numerales romanos para el mes, algo que no sucede en francés, ni en inglés, ni en alemán … pero sí se hace frecuentemente en español. Este dato es, para mí, clave.

Insisto, no buceen Vds. Esos documentos inicialmente filtrados fueron rápidamente retirados.

Otrosí digo, ni Tissier ni Williamson son dechados de la informática. Tampoco lo es Monseñor de Galarreta, ciertamente. El primero la odia hasta el punto que hace informes, de un orden y profundidad por lo demás soberbios, de 40 páginas manuscritos antes que agarrar un ordenador. Quien sea, y como sea, ha tenido que actuar a través de persona interpuesta. 
Diré algo más. Y lo diré desde la mayor y más profunda de las discrepancias con Monseñor Williamson en más de un tema y en más de dos. No participo con él de su visión sobre el tema judío para nada. Creo que le hizo un flaquísimo favor a la Iglesia, y que fue causa de varias humillaciones del Santo Padre en Israel. Monseñor Williamson podrá haberse comportado como un auténtico insensato, o un malinformado, en varias ocasiones –o incluso en muchas ocasiones- pero es un Obispo que va de frente, con hombría, con saber estar, con gentileza y con caballerosidad. No todos pueden decir lo mismo. Me cuesta mucho creer que sea Williamson quien lo haya filtrado. Muchísimo. Como algo he tratado a Monseñor Williamson me atreveré a decir lo evidente: que haber filtrado este documento estaría muy en contra de su psicología habitual. El comportamiento pasado suele arrojar muchas luces sobre el comportamiento futuro.
¿Habrá, por tanto, venido de España o Argentina la filtración, o del mundo hispánico? No lo sé, pero la evidencia indirecta así lo sugiere. Y fuertemente. Se podrían probar más cosas y dar más datos, pero no lo haré. Yo tampoco quiero entrizarme los dedos. Pero que cada cual juzgue la evidencia indirecta. Se coge más pronto a un mentiroso que a un cojo. Y cuando este mentiroso es, además, sedicioso, avieso y cobarde, antes o después cantará. O recantará. Unas veces el amo, otras el perro fiel.
Y esto con independencia de que el Sacerdote que hace el último pase pudiera estar hasta en territorio anglosajón, como la evidencia indirecta así parece apuntar. Pero este pobre cura es un mero tonto útil que hace de amplificador. A lo peor se lleva todos los palos él, pero la estupidez también tiene un precio.
La Providencia tiene extraños mecanismos de manejarse. Resulta que el sedicioso filtrador ha conseguido lo opuesto de su pretensión, es decir, que ahora Roma es aún más favorable ahora a una regularización de la FSSPX. De entrada la respuesta de Fellay y sus dos Asistentes Generales sólo puede ser tildada de impoluta. Y, además, el Superior General (su condición episcopal aquí ni quita ni pone Rey) y sus Asistentes, elegidos en un Capítulo General por la FSSPX, se decantan a favor del acuerdo mientras que tres Obispos sin cargo alguno (y sin otro rol principal más que los de administrar los Sacramentos de la Confirmación y el Orden) se oponen. La pregunta es obvia: ¿Quién eligió al Superior General? La FSSPX en su conjunto, ¿verdad? Pues está todo dicho.
Personalmente a mí no me gusta todo esto. Hubiera deseado que, si los cuatro Obispos de la FSSPX tienen que hablar entre sí, que hablen. Hubiera deseado que esto no se hubiera filtrado, porque creo que Monseñor Fellay debe permanecer fuerte y exigir a Roma que el apostolado de la FSSPX sea respetado y salvaguardado, y mostrar abiertamente la respuesta de Monseñor Fellay en el epílogo de una discusión canónica y a las puertas de una decisión sobre ese particular socava su posición. Y creo que estas filtraciones no hacen sino dañar el bien común de la Iglesia y de la Hermandad de San Pío X. Por eso abomino grandemente, de quienes lo han hecho. Me alegro, no obstante, de la visión noble y de altas miras que inspira al Superior General de la Hermandad y a sus Asistentes Generales. Pero me duele la manera cómo la conocí y cómo fue conocida por el gran público.
Pero Dios escribe recto con renglones torcidos. Ahora, parece, es el caso de un Dios que escribe recto de filtraciones torcidas.
Y otra cosa, y esto no va para Vds., queridos lectores, sino para el Altísimo. ¡Señor Dios: que sepas que tu sentido del humor sigue sin gustarme!

Rafael Castela Santos

2 comentários:

Carlos disse...

48 horas, dias? Faltou a indicação. Há quanto tempo vocês têm essas cartas?

Utraque Unum disse...

Con defensas como esa a ver quién quiere enemigos.