Si supiera, Señor, si yo supiera
que camino me tienes separado
quizás este temor desamparado
tornaría su afán en buena espera.
Y aun si fuera víspera certera
de llegar ante Ti y de ser juzgado
podría yo cargar con mis pecados
con esperanza fuerte y verdadera.
Pero temo, Señor, estar perdido
en un sendero que recién comienza
y mi vista no llega al horizonte,
mas sé yo que lo que pido no es debido
y me conformo con andar a ciegas
(Tu Santa Providencia dirá a dónde).
Gabriel de Erausquin
(RCS)
Sem comentários:
Enviar um comentário